Sherwin Williams llega en 1999 a Mérida, donde abre su primera sucursal en “El Pocito”. Gracias a la excelente aceptación de sus productos, pronto se ve en la necesidad de habilitar una bodega, lo que hoy es su CEDIS, para surtir los pedidos de gran volumen.

Poco después la firma crece hacia Progreso, donde instala una sucursal en la que comercializa la línea industrial NAPKO, cuyos anticorrosivos son demandados por los astilleros y pescadores del puerto, convirtiendo a Yucatán en pionero en el uso de la línea y marcando la pauta para la expansión de la marca, que cuenta hoy con 11 puntos de venta en el Estado.

Sherwin Williams, que ha establecido importantes alianzas estratégicas —con Farmacias del Ahorro, Grupo Megamedia, Grupo Sadasi, por mencionar algunas—, es un activo participante en actividades de la Cámara Nacional de Vivienda y de la Cámara Nacional de la Construcción, en cuya sede incluso un aula tiene su nombre.

Para la marca también es importante el apoyo a proyectos sociales y altruistas, como la Copa Sherwin Williams de Yates de Vela, en pro de una Asociación Civil, y el patrocinio a los dos de los principales equipos deportivos de la entidad: los Leones de Yucatán y los Venados de Mérida.

Sherwin Williams continúa con su plan de crecimiento en Yucatán, que contempla la apertura de tres sucursales por año.